Para diferenciar las joyas de alta calidad del oro, tenga en cuenta los siguientes factores:
1. Pureza del oro: el oro puro es demasiado blando para la joyería, por lo que generalmente se mezcla con otros metales para mejorar su durabilidad y resistencia. La pureza del oro se mide en quilates. El oro de 24 quilates se considera oro puro, pero es demasiado blando para la joyería. Las purezas de oro comunes para joyería incluyen 18 quilates (75 % de oro), 14 quilates (58,3 % de oro) y 10 quilates (41,7 % de oro). El oro de quilates más alto es generalmente más valioso pero puede ser menos duradero.
2. Quintado: busque quintados y sellos en las joyas. Los sellos indican el contenido de oro y la marca del fabricante. Por ejemplo, el oro de 18 quilates puede estar estampado con “18 quilates”, “750” (que se refiere al 75 % de oro) o marcas similares. Los distintivos varían según el país, así que familiarícese con los estándares relevantes en su región.
3. Peso: las joyas de calidad suelen ser más pesadas debido a su mayor contenido de oro. Compara el peso de una pieza de joyería de tamaño similar de diferentes fuentes. Tenga en cuenta que otros factores como las piedras preciosas y los diseños intrincados pueden contribuir a las variaciones de peso. Hay joyas que se elaboran con una técnica que da volumen; pero están huecas (vacías) pues no tienen metal en su centro.
4. Color: el oro puro es naturalmente amarillo, pero cuando se combina con otros metales, puede crear diferentes tonos. Por ejemplo, el oro blanco se mezcla con metales blancos como el paladio o la plata. El color debe ser consistente y uniforme en toda la pieza.
5. Mano de obra, diseño y artesanía: Examine la calidad general de la construcción de la joyería. Busque bordes lisos, broches seguros y piedras preciosas bien engastadas. La joyería de alta calidad está cuidadosamente elaborada con atención al detalle.
6. Piedras preciosas: si la joyería incorpora piedras preciosas, considere también su calidad. Evalúa factores como el color, la claridad y el corte. Las piedras preciosas como diamantes, rubíes, zafiros y esmeraldas deben ir acompañadas de la certificación adecuada de laboratorios gemológicos acreditados. Habrá que distinguir claramente si es una perla natural o cultivada, si es una piedra natural o sintética. Mostrar explícitamente los karates o puntos, según se trate de la piedra.
7. Reputación y fuente: compre joyas de joyeros o marcas acreditadas y establecidas. Investigue un poco y lea las reseñas para garantizar su credibilidad. Las fuentes confiables a menudo brindan la documentación adecuada y ofrecen garantías o certificaciones para sus joyas.
Recuerde, es fundamental consultar con expertos o tasadores que se especialicen en joyería si no está seguro de la calidad o el valor de una pieza en particular.